ADVERTENCIA

Esta es la historia de unas personas, amigos, que comenzaron a reencontrarse por medio de cartas via mail... lo que suceda está por verse... está diagramado a tiempo real (una carta espera a la otra, casi siempre) si sos impaciente... ni lo intentes, los autores no se hacen responsables de daños colaterales. Lo que si te recomiendan es que empieces por la primera carta, asi la comprension global de la historia es mayor, busca en la barra lateral las publicaciones o anda hasta el final del blog (que ahi comienza) y buena jornada literaria.

martes, 14 de abril de 2009

14 de abril de 2009
Pablo:
Hola ¿Cómo andás? Espero que mejor que yo. Disculpá que no esperé tu carta para contestarte, pero no estoy bien. Hace unos días que no puedo parar mi cabeza, todo el tiempo me da vueltas esta historia y no puedo dejar de pensar en vos y en Laura. Lo peor de todo son esas lagunas que no puedo completar con datos y que me asaltan a cada momento. Tengo la sensación de que mi cuerpo ha sido desmembrado. Ando dando vueltas por el hospital pero no percibo que mis pies toquen el suelo. Como, muy poco, pero sin notar que mastico. No puedo permanecer inmovil, porque me invade una horrible sensación de que mi cuerpo cae, eternamente, por un espacio sin techo ni fondo, o de que asciendo, eternamente, como arrastrado por una fuerza que me chupa hacia arriba. Soy incapas de coordinar los movimientos de mi cuerpo y siento que todo el mundo aqui lo nota, lo que me da terror de que me aumenten la medicación o que me duerman, otra vez, por un par de días. No sé cómo contener este horrible caos. Y tengo la certeza de que todo se relaciona con estas lagunas de ausencias en mi mente. Pensarás que estoy loco, y no te equivocas, pero siento que estas lagunas forman un vacío dentro mío que es atraído por estas fuerzas que me manejan a su antojo. En un primer momento pensé en aguardar a que todo se calme y que pase de algún modo, pero miro hacia dentro mio y tengo la sensación de estar viendo una escena incompleta, una pared inmaculada donde en el centro debiera haber un cuadro que la complete y sólo se ve un vacío, una señal que denuncia esa ausencia, la poene en evidencia a los gritos.
Con el correr de los días, me di cuenta de que lejos de parar esto empeora y entonces fue cuando decidí escribirte, confio en que vos sos la única persona que puede ayudarme a llenar estas lagunas. Te pido que me des, aunque sea, el empujón enicial, para enteder, mejor dicho, recordar qué fue lo que nos pasó, a los tres que éramos tan unidos para terminar así, tan distanciados y sin poder hablarnos. Siento que nuestra relación era el motor que nos impulsaba a hacer cosas y hoy eso se perdió. No se el por qué. Debe haber sido algo muy pesado para que se me borre de la mente y me cause estas horribles sensaciones. Siento que te escudas en el tercero que apareció en la relación, pero eso no me convence.


Espero tu pronta respuesta. Saludos. Darío.

No hay comentarios: